Reseña: Déjame entrar - John Ajvide Lindqvist

DÉJAME ENTRAR: JOHN AJVIDE LINDQVIST

Autor: John Ajvide Lindqvist
Editorial: Espasa
Páginas: 455
ISBN: 9788467026658
Ebook

SINOPSIS

Oskar es un niño solitario que vive en un barrio obrero de Estocolmo. No tiene amigos y sus compañeros de clase le maltratan.

Una noche, en el parque de delante de su casa, conoce a Eli, una niña un tanto extraña y misteriosa.
Se hacen inseparables a pesar de la advertencia inicial de ella de que no pueden serlo.
A medida que su amistad avanza, a su alrededor empiezan a suceder inquietantes desapariciones y asesinatos. 

Intenté leer este libro en varias ocasiones, pero lo dejaba siempre al cabo de pocas páginas, no sé muy bien que me hacía abandonarlo, quizá no era el momento... por fin hace poco lo terminé y me ha alegrado leerlo. Después vi las dos películas que se han rodado basadas en la historia, luego os cuento también mis impresiones.

Primero de todo, situaré un poco la acción: la novela transcurre en Blackberg, un suburbio de clase trabajadora de Estocolmo, a principios de los 80.

Déjame entrar es una novela de vampiros, me jode un poco ahora tener que escribir que no tiene nada que ver con los crepúsculos, pero no te confundas, no es porque sea fan de Edward, Bella y chusma varia, no... me jode tener que añadir esto porque no entiendo que al hablar de vampiros se piense en los de Stephanie Meyer, ¿por qué? 
Es un género que lleva años existiendo, hay numerosos ejemplos en la literatura tanto clásica como moderna entonces, ¿por qué se piensa en la chusma de los vampiros?
Pues eso, nada que ver. Realmente el autor pocas novedades aporta al mundo de los vampiros, no hay nuevas normas ni leyes extrañas, cosa de agradecer.

 Sólo hay un par de puntos que me chirriaron un poco y os lo voy a contar porque son cosas poco relevantes para la historia... por un lado, tenemos esa particularidad que da título a la novela, ese "déjame entrar" que ya usaban los vampiros de Salem's Lot para poder entrar en las casas de sus víctimas. Eli no puede entrar así como así en determinados sitios, por ejemplo, no puede entrar en la habitación de un hospital pero en cambio sí puede entrar en la recepción del mismo hospital y eso no deja de ser algo extraño ya que en los hospitales las habitaciones no son en realidad "nuestras" entonces ese concepto de propiedad que se podría argumentar no me es muy válido...
Por otro lado está la edad mental que tiene la niña. En el libro en algún momento se dice que ella sufre una regresión al estar con Oskar, se comportaba de forma infantil, quería jugar... y no lo acabo de ver claro, o sea, alguien que tiene más de 200 años, por mucho que le guste un niño de "su edad", ¿por qué va a sufrir una regresión y comportarse como él? No tiene mucho sentido, Eli es un vampiro que cuenta con años de experiencia y conocimientos, ¿por qué iba a cambiarle el contacto con un niño? Y por Dios, ¡no me vengáis con el amor y la amistad! Y me pregunto yo, cuando Oskar crezca, ¿qué hará ella? ¿crecerá mentalmente con él? tampoco tendría eso ningún sentido, lo siento pero no lo veo.

La trama principal podríamos considerar que es la historia de Oskar y Eli, o quizá es la que más me acabó interesando y la convierto yo en principal..., pero hay tantas subtramas como personajes y tan bien desarrolladas que al final no sabemos cual es la importante y cual la secundaria.
Así pues, tenemos a Eli y Oskar y su relación, amistad, amor... pero también nos encontramos con acoso escolar, alcoholismo, pedofilia, problemas familiares que acaban pagando los hijos... todos estas historias secundarias se relacionan entre sí poco a poco, creando una compleja historia.

Ajvide se sirve de los diferentes personajes de la novela para retratar el lado oscuro de las personas y realizar una crítica social sobre lo que ocurre en la escuela cuando nadie mira, lo que ocurre en algunos hogares donde residen alcohólicos sin futuro, padres que no se ocupan de los hijos, madres que a pesar de sus buenas intenciones no actúan de la mejor manera... 

A lo largo del libro, el autor se va guardando información que nos desvela poco a poco, algunos giros de la historia nos van a sorprender pero es cierto que a poco que pensemos en ello deduciremos por donde van los tiros y nos puede resultar hasta previsible, pero aún así, estoy convencida que como estaremos ya bastante enganchados a la historia, no lo dejaremos por algo así.

Déjame entrar no es una novela que transcurre de forma rápida, su ritmo es algo lento en algunos momentos y realmente la eliminación de alguna trama secundaria o de algunas páginas ayudaría a su desarrollo, no digo que me haya aburrido porque no es el caso, pero quizá no hace falta tener veinte frentes abiertos.

Lo más destacable son los personajes y como los caracteriza su autor, sabe darnos las pinceladas necesarias para que todos ellos sean diferentes, muy humanos realmente, incluso Eli.
El acierto del sueco es elegir a dos protagonistas que encarnan a su manera al antihéroe, Eli es una joven vampiro que se aleja del ideal de belleza y crueldad que tanto nos hemos tragado, es verdad que debe alimentarse y para ello debe matar, pero se nos presenta como alguien fuerte, seguro pero a la vez inocente; Oskar por el contrario, es un niño  bastante débil, tímido, no soporta la situación que vive pero la esconde y no intenta cambiarla, lo que los dos comparten es el aislamiento y la soledad, ahí es donde a pesar de las diferencias se asemejan, y poco a poco, Oskar va cambiando y lo hace por y para Eli, ella le da fuerza y quiere que se sienta orgullosa de él.

A través de flashbacks conoceremos un poco el pasado de la chica, como fue convertida y que era en realidad (algo que no os cuento porque me sorprendió leerlo, no sé si aporta mucho a la novela, pero sorprendente fue).

Es una novela diferente, supone un aire fresco a las novelas de vampiros y aunque su autor dice que se inspiró en Carmilla de Sheridan Le Fanu, debo confesar que no le veo similitudes... El autor escribe de forma elegante, con un lenguaje sencillo, sin florituras, descripciones precisas y que nos sitúan muy bien donde transcurre la acción. Se hace cómodo de leer y seguro que alguna otra novela del autor caerá en mis manos.

En su conjunto es bastante light en las explicaciones, poca casquería hay y no entra en descripciones morbosas, si bien hablando con otras personas que han leído la novela, comentaron que en algún momento sí les parecieron algunos detalles demasiado explícitos, no sé, francamente lo veo de verdad sin problemas para estómagos sensibles, pero oye una nunca sabe qué han visto y qué aguantan los demás.

Así pues, después de todo lo anterior, Déjame entrar me parece una novela entretenida, no aporta novedades al mundo vampírico pero se aleja del mito romántico y es de agradecer. Su mejor punto es el tratamiento de los personajes, estos nos parecen muy humanos, sin reacciones extrañas, probablemente nosotros actuaríamos igual.

A pesar de haber muchos personajes y subtramas, el autor los aúna perfectamente y nos mueve de forma más que adecuada por ellas, mantiene de esta manera nuestra atención en varios frentes y muchas veces no sabemos quién está hablando hasta que por algún detalle lo situamos, esto aumenta nuestra concentración en lo que ocurre y nos obliga a ponernos en la situación del personaje que lo siente y padece.

Hay un buen equilibrio entre descripciones y diálogo, ayudando a que no nos aburramos o sea todo demasiado lento. Pero, no todo es positivo, algunos detalles no me han gustado, como la poca tensión que encontramos, la lentitud en algunos momentos, excesiva recreación de algunas escenas...
Algunos desarrollos son previsibles y el final es algo previsible, a pesar de los giros argumentales no nos llega a sorprender. Es algo largo y le sobran algunas páginas.

Por todo lo anterior, es una novela que recomiendo, tiene sus cosas pero en general me ha gustado y me alegra por fin ponerle el check.

Si alguien quiere ver las películas, hay dos opciones:

1. La sueca, que es bastante fiel al libro, se toma alguna pequeña licencia y quita algunas situaciones (normal también) pero lo sigue. Es la más recomendable de las dos, a pesar de que los actores protagonistas no me gusta demasiado como actúan, ni Oskar ni Eli.

2. La americana, que se toma muchas licencias, escenas que desaparecen, aunque sigue más o menos las líneas generales, se ve muy muy diferente. Eso sí, los niños me han gustado mucho más.

Por mi parte vi una detrás de otra, sé que soy muy friki... y me quedo con la sueca.

VALORACIÓN: