Reseña: Tokio Blues

SINOPSIS

Toru Watanabe escucha de forma casual, en un aeropuerto, la canción Norwegian Wood de los Beatles y eso hará que sus recuerdos retrocedan a su juventud. 

El protagonista recordará su adolescencia y su posterior entrada en la Universidad. 

Toru nos contará lo que vivió con Zizuki y Naoko, dos amigos que marcaron su vida. También nos hablará de Midori, una joven que conoce años después.

Tokio Blues es una novela que se publicó en 1987 y la edición de Tusquets, que es la que yo leí, cuenta con casi 400 páginas.
Es el segundo libro que leo del autor ya que hace años me adentré en su Kafka en la orilla, historia que me gustó muchísimo. 
Pero, ha pasado el tiempo y hasta la llegada de El Tren Polar (Club de lectura al que me apunté y del que ya os he hablado) no había vuelto a leer nada de Haruki Murakami y, ahora que lo he terminado, creo que dejaré pasar algo más de tiempo para elegir tercera novela.

Entonces... ¿no me ha gustado? Sinceramente, no mucho. Imagino que decir que no te gusta una novela de Murakami es algo raro ya que es de esos autores que tanto crítica como lectores adoran y es casi una herejía hablar mal de él. Si únicamente hubiera leído esta novela, pensaría que está sobrevalorado, por suerte Kafka lo equilibra y hará que le dé -cuando esté preparada- otra oportunidad, para ver si es un "a veces sí" o un "nunca más". Ahora os cuento qué no me ha gustado y lo que sí, que también hay cosas, no os penséis que todo lo veo malo.

La historia está narrada en primera persona, Watanabe es quién nos descubre lo que ocurrió en su pasado y lo hace equilibrando muy bien descripciones y diálogo, es una novela que nos contextualiza bien donde ocurre y nos da unas buenas pinceladas para imaginar escenas, excursiones y situaciones.
Lo que nos cuenta se desarrolla a finales de los años 70 y entramos de lleno en el mundo estudiantil y universitario del momento.

Tokio Blues nos cuenta una historia muy sencilla, con una trama poco original y a mi gusto, muy previsible desde casi sus inicios. Esto, a priori, no tendría porque desagradarme, hay muchas novelas previsibles con las que he disfrutado más con la forma en la que está contada que no con lo que ocurre, pero llegó un momento en que simplemente deseaba que pasara lo que llevaba ya mitad de libro esperando y de esta manera poder terminarlo porque sabía que eso marcaría el final, como así fue.

Me han gustado pero no sorprendido en Murakami, las menciones de otros libros y de canciones. De los primeros se cita varias veces El gran Gatsby, libro que leeré -creo- a finales de año en el club de literatura y cine y La montaña mágica de Thomas Mann que leí el año pasado y fue mi libro más largo de 2017, sobre el de Scott Fitzgerald no puedo decir nada aún, pero sobre el segundo cuando se menciona hay mucha similitud entre el argumento de La montaña y lo que le ocurre a los personajes, quizá con la música ocurra igual pero no lo sé, me parecen guiños interesantes y que nos dan una idea de los gustos del japonés.

La novela se basa en la nostalgia y en la muerte, todo aderezado con escenas sexuales diversas. Los personajes sufren de diversas maneras y eso les dejará marcados, el suicidio me pareció casi una forma de adaptación, una salida a esa incapacidad para enfrentarse a las exigencias del futuro, a la madurez y a los cambios, podríamos pensar que es una forma de rendirse antes de intentarlo, pero tampoco lo viví así, lo vi como una manera de aceptar esa incapacidad y por lo tanto, acabar antes de empezar. 
¿Es una novela triste? No lo fue para mí, aunque si lo miro con objetividad imagino que sí, de ahí que la haya etiquetado como drama y romántico. 
Nos habla sobre la fragilidad humana y sobre el paso, traumático a veces, de la juventud a la adolescencia y de ésta, a la edad adulta y si algo he visto con los años es que no conecto nunca con los personajes frágiles, cosa que también ha ocurrido aquí, una vez terminado el libro no noté nada más que alivio por empezar otro, no había estado mal pero no me había removido nada por dentro.

Hay incluso algunas partes de la historia que creo que se alargan demasiado, se me hicieron un poco pesadas y aburridas, muy darle vueltas de nuevo a lo mismo, quizá desde otra perspectiva pero lo mismo en definitiva.
Lo encontré muy lento para lo previsible que me resultaba.

Sobre los personajes, estos están bien caracterizados, es verdad que hay una gran profundidad psicológica pero, son un sí pero no. No llegué a conectar con ellos porque a pesar de saber como eran y porque actuaban así, no llegué a creérmelos, sí que explicaban qué sentían y querían pero para mí no tenían mucha lógica, es una novela introspectiva pero con, para mí, serios fallos en esa mirada hacia el interior de cada personaje.
Los personajes masculinos acaban representando la fuerza y los femeninos la debilidad, y es tan simplista que da hasta rabia, no penséis de todas maneras que únicamente las mujeres se suicidan y por eso digo lo anterior, pero los hombres lo hacen por su incapacidad de enfrentarse a las responsabilidades y las mujeres en cambio, a causa de los hombres y como siempre, esto me llena de indignación y tengo que escribirlo a pesar de que estemos siempre "disculpando" a estos escritores por ser asiáticos y por tener diferente mentalidad y ya se sabe, ellos consideran así a las mujeres, pues no, no y para siempre no.
Y eso que hay uno de los personajes femeninos que parece más fuerte que las otras, es más espontánea y no parece tan supeditada a los hombres, aunque a medida que avanza la novela hay ciertos aspectos que hacen que esta primera impresión se tambalee un poco, casi puede salvarse, casi.

Para ir finalizando, es una novela que me ha resultado entretenida pero sin más, no creo que perdure en mi memoria durante mucho tiempo y hace que mi contacto con Murakami ahora mismo sea agridulce y lo tenga en cuarentena, creo que probablemente se le esté sobrevalorando y que actualmente escriba lo que escriba se va a convertir en best-seller, sea bueno o malo y lo peor, que se hablará maravillas de ello, aunque sea su lista de la compra.
No sería un libro que recomendaría para empezar con Murakami, antes Kafka en la orilla, que más me vale no releer por si acaso.

VALORACIÓN: