Ryunosuke Akutagawa: Rashômon y otros cuentos

RASHOMON Y OTROS CUENTOS - AKUTAGAWA

SINOPSIS

Los relatos incluidos en esta antología nos trasladan al Japón feudal, un país asolado por las guerras, el hambre y la injusticia social, conformando un escenario atormentado en el que las dolorosas contradicciones de la existencia humana se muestran ante el lector con una brutalidad no exenta de lírica belleza. Destacan, entre ellos, el que da título a esta selección, el inolvidable «Rashomon», sobre el que Akira Kurosawa se basó para dirigir su película homónima, ganadora de un Óscar en 1950, o los inolvidables «En el bosque», o «La nariz», por citar sólo los más conocidos. Akutagawa, trascendiendo las fronteras del tiempo y del espacio, se sitúa por derecho propio en la historia de la literatura universal. Su sensibilidad extrema y su capacidad para desentrañar los aspectos más terribles y complejos de la naturaleza humana, convierten sus cuentos en verdaderas joyas literarias.

Hace un tiempo fui a una conferencia sobre la relación entre la literatura y el cine y uno de los ejemplos que nos dieron fue el de Rashômon. Hace muchos años vi la película de Akira Kurosawa, lo que no sabía era que ésta se basaba en dos relatos de Ryunosuke Akutagawa, los llamados: Rashômon y En el bosque y los dos se incluyen en esta antología. 

Pero no son los únicos, por orden podemos leer: Rashômon, La nariz, Kesa y Moritô, En el bosque, El biombo del infierno, Un cuerpo de mujer y Senin.
De todos ellos los que más me han gustado han sido los cuatro primeros, el del biombo se me ha hecho un poco largo y los dos últimos ni fu ni fa.

Rashômon es el protagonista de este relato bastante corto, es el sirviente de un samurái al que han despedido. Se encuentra en la ciudad de Kioto y se refugia en un edificio bastante derruido, ahí encuentra que han amontonado varios cadáveres. El ambiente es lo mejor de la historia y su aparición en la película es mínima, casi que el nombre es lo único, pero aún así me ha gustado.
En La nariz conocemos a un hombre con una nariz de 16 centímetros, esta siempre le ha supuesto una vergüenza aunque nunca lo ha reconocido. Me ha gustado mucho por lo que implica su complejo pero también su falta
Keisa y Moritô es bastante parecido a En el bosque, y nos encontramos con la visión de un asesinato desde dos perspectivas diferentes.
En el bosque encontramos varios testimonios sobre un mismo hecho, el asesinato de un hombre. Con cada visión vamos modificando nuestro punto de vista y es de lo más interesante. 
El biombo del infierno es el relato más largo y se hace incluso un poco pesado. Añade algunos detalles que no tienen demasiada importancia para su desarrollo y se podrían quitar.
Nos cuenta la historia de un pintor y de su hija y aunque es interesante lo dicho, le sobran páginas.
En Un cuerpo de mujer asistimos al recorrido de una pulga y gracias a ella, el marido tendrá una nueva visión del cuerpo de su esposa. Relato muy corto que bueno, ahí está.
En Sennin, el relato que finaliza esta antología, asistimos a la transformación de un hombre en sennin, o sea, en un ermitaño sagrado con poderes mágicos como volar y disfrutar de una extrema longevidad. Es algo extraño pero no está mal. 

Después de contaros un poco de que van los relatos, quiero decir que la recopilación no está nada mal. Se leen muy rápido y te queda un buen sabor de boca después de cada lectura.
El autor empezó a publicarlos a partir de 1915, cuando contaba con unos veinte años y a pesar del tiempo que ha pasado, no han dejado de ser interesantes para el lector.

Es verdad que nos hablan de un Japón feudal, del honor y de como se resolvían las cosas, pero siempre intenta enfocarlo desde el sufrimiento de los personajes, creando situaciones que les ponen en una encrucijada pues deben decidir muchas veces entre la muerte o el deshonor.

Es complicado juntar varias historias con la misma calidad y no es este el caso, como os decía al inicio algunos me han gustado muchos y otros algo menos, pero en general la valoración es muy positiva y cuando terminé este libro empecé Vida de un loco, en el que encontramos tres relatos (Uno de ellos es el del biombo) y una carta, pronto os contaré que tal.

Lo que no me ha acabado de convencer es el tratamiento de las mujeres en sus relatos. El autor las describe como agresivas, egoístas y traicioneras, aunque al inicio nos parezca que no, en su desarrollo todas tiran hacia esta idea y eso mal y más cuando las víctimas de ellas son sus "pobres" maridos o sus "pobres" amantes, en fin, algo a tener en cuenta a la hora de leer esta escritor.

Por cierto, como curiosidad decir que Ryunosuke Akutagawa después de enfermar en 1926 empezó a tener alucionaciones visuales (creo que estas se verán mejor en Vida de un loco) y se suicidó un año después ingiriendo Veronal. Vaya que murió con 35 años.

Ya sabéis, si buscáis algún libro de relatos, no es mala opción, el autor os trasladará al Japón de sennins y samuráis y seguro que lo disfrutáis.

VALORACIÓN: