Elio Quiroga - Gotas

GOTAS - ELIO QUIROGA

 

SINOPSIS  

Una adolescente y su padre, un reconocido físico poco ortodoxo, disfrutan por primera vez de unas buenas vacaciones en Gran Canaria, en un complejo turístico de alto standing. Lo que empieza como unas vacaciones paradisíacas en una isla de ensueño, terminará convertido en una espantosa pesadilla cuando estalle una extraña infección entre los clientes del resort, que se convertirán en espantosos muertos andantes. Y lo peor de todo es que la vía de contagio parece ser el agua, por lo que cualquier contacto con ella puede ser mortal, y te puede convertir en un zombi sin mente. Rodeados de zombis, solos y abandonados, tendrán que echar mano de su ingenio para escapar de algo mucho peor que la muerte. Y la única manera de salir con bien del lugar se encuentra oculta en un diario escrito hace más de un siglo…

No es la primera vez que Elio Quiroga aparece en este blog, en el pasado os reseñé la fascinante y no apta para todos los públicos Idyll, y ahora vuelvo con esta novela de terror publicado por Dolmen.

 

430 páginas en una edición bastante chula. La portada es llamativa, de varias tonalidades azules y su título, Gotas, de lo más adecuado.

 

La novela trata de lo que les ocurre a Eduardo y Jenny, padre e hija, en Olamarina, un complejo turístico situado en Gran Canaria. 

Pero lo que prometían ser unas vacaciones idílicas, no lo son tanto pues una infección parece ir afectando a los clientes del resort. Además, la vía de contagio parece ser el agua. Para complicarlo aún más, los militares y otros estamentos secretos hacen aparición en escena.

 

Tengo que mencionar primero lo que hace original a la publicación en sí, y es la mezcla de un artículo del periódico, de dibujos para ejemplificar lo que está ocurriendo, de fuentes en función de quién habla, de si leemos un diario... la verdad es que es una mezcla visual muy interesante.

 

La ambientación es un punto a favor de Gotas, siempre es un acierto cuando un thriller o una novela de terror transcurren en un sitio cerrado. Olamarina la verdad es que es un complejo enorme pero aún así, tiene sus barreras, puertas y no deja de ser un lugar cerrado y por ello, claustrofóbico.

Ah, y no parece casual el parecido de Olamarina, ciudad de vacaciones, y Marina d'Or, ciudad de vacaciones...y lo dejo ahí. 

Novela contada por un narrador omnisciente que nos va situando en los diferentes contextos y frente a los diferentes personajes.

Los protagonistas son indudablemente Eduardo y Jenny, ellos son los que van descubriendo poco a poco lo que ocurre, como hacerle frente e incluso, como sobrevivir.

La verdad es que no me he sentido identificada con ellos ni tampoco se ha activado mi empatía, pero no por ello son malos personajes, su caracterización no es mala tratándose de una novela de terror.

Lenguaje a veces un poco complejo, sobretodo cuando Eduardo nos ilustra con teorías, pero como no estoy dispuesta a sacarme la carrera de física para entenderlo... he ido avanzando incorporando algunos conocimientos de forma abstracta.

Novela que empieza algo lenta pero que luego coge ritmo, la verdad es que encadena acción tras acción, eso sí, mezclada con extractos de un diario, cosa que baja un poco la intensidad. 

Me ha gustado que la trama no se centrara solo en lo que le ocurre al padre y a la hija. El autor nos deja algunas páginas de lo que les pasa a otros huéspedes, eso siempre añade la idea de que hay muchos infectados y que estos tenían una vida antes de llegar a Olamarina, les personaliza. 

Bastante más descripción que diálogo, aunque estos últimos siempre han tenido su importancia. Y por cierto, el final, aunque un poco esperado no por ello deja de ser el adecuado.

Por cierto, como curiosidad añadir que cuando lleguemos al final de la lectura, nos encontramos con un código QR y cuando visitamos el enlace que nos aparece, llegamos al guión de una película que cuenta lo que ocurrió en Olamarina.

Después de lo anterior, decir que es una novela que me ha costado un poco terminar, creo que a pesar de gustarme, el hecho de que el ritmo no fuera del todo rápido, hacia que no me enganchara del todo.

Vaya que nos los dejaba nunca en un momento crucial y por eso podía pasar a otra lectura.

 

Capítulos muy cortos, eso sí, que permitían leer muchos de una sentada. 

 

Para finalizar, a pesar de lo último, es una novela que recomiendo, me deja con las ganas de volver a leer alguna cosa del autor y por cierto que tengo en casa desde hace muchísimo Los que sueñan... así que, volveré con él. 

VALORACIÓN: