Begoña Parte y Maite Aldaiturriaga - Buscando un trébol de cuatro hojas

 BUSCANDO UN TRÉBOL DE CUATRO HOJAS - BEGOÑA PARTE Y MAITE ALDAITURRIAGA

 

SINOPSIS  

Siempre he creido que las estrellas son deseos esperando ser cumplidos. Era un mes cualquiera, una noche cualquiera. Brillaban como nunca pero ninguna caía. Bajé la mirada y los ví, estaba rodeada por cientros de tréboles. Saqué la cámara y empecé a buscar detalles que los hicieran diferentes, únicos. Una hoja marchita; un pequeño insecto vagando; tallos oscilantes; otros quietos y en silencio... Pero ninguno con más de tres pétalos. Desde entonces ya no vivo esperando estrellas fugaces. Solo quiero encontrar un trébol de cuatro hojas.

Me enamoré de la portada de este libro gracias a verlo por Instagram, fue posar mi mirada en ella y querer tenerlo, en ese mismo momento lo compré. Eso sí, me he tomado mi tiempo para leerlo pues ha transcurrido algo más de un año desde que me llegó.

El libro lo firman la escritora Begoña Parte y la ilustradora Maite Aldaiturriaga, y creo que forman un buen tándem. Me ha gustado tanto una parte como la otra. 

Publicado por la editorial Letrame, el libro es un placer al tacto también. Tapa dura, con buena calidad del papel, no puede ser más chulo. 176 páginas que ahora os cuento qué me han parecido.

El libro es una mezcla de esas que cuesta de englobar dentro de una etiqueta, inicialmente en la introducción parecía una cosa, pero a medida que he ido avanzando, lo englobaría dentro de la prosa poética ilustrada. ¿Existe? Pues si no es el caso, debería.

Para los que os asustéis cuando leéis poesía (gente como yo, vaya), deciros que nada más lejos de los versos cursis a kilómetros de la realidad, entendibles por pocos. 

Se la puede llamar prosa poética por la belleza del texto, como está escrito y como conectan con nosotros.

Es un llibro lleno de sentimientos, de esos por lo que todos hemos pasado y que podemos entender.

 

Buscando un trébol de cuatro hojas se centra en un momento concreto en la vida de Mackenzie Salas, una joven que nos cuenta lo que es para ella el amor. Ha tenido la suerte de encontrar a la persona adecuada y vivimos junto a ella el desarrrollo de la historia de amor.

Los escritos de Begoña nos atrapan y complementan o son complementados muy bien por las ilustraciones de Maite. 

La prosa es sencilla pero profunda a la vez, directa, intimista, sensible, conecta con nuestros sentimientos. Las ilustraciones, en general, son en blanco y negro aunque con algún toque en color, que hace que nuestra atención se centre en algo en concreto. Son grandes, de líneas sencillas, trazo fino y bien definido, un placer visual.

 

Buscando un trébol de cuatro hojas es un libro que da para leer rápido pero te gustaría que te durara mucho más. Hay algunas palabras, frases, párrafos que conectan con el lector, ahí cuando miréis las ilustraciones sentiréis que las autoras han establecido un vínculo con vosotr@s y contado algo de vuestro pasado o presente.

El libro está estructurado en 5 partes, inicialmente tenemos la introducción y luego otras cuatro partes, iniciadas con el porcentaje de una batería, que van del 1 al 25%, del 25 al 50%, del 50 al 75% y llegamos al 99% con el desenlace de la historia.

Como punto negativo y ya os digo que es algo personal, mencionaría la tipografía elegida para los textos, esta a veces resulta algo complicada de entender. Quizá otra más clara me hubiera gustado más, pero eso no quita méritos a la obra.

Un trabajo excepcional, no sé porqué tarde tanto en leer el libro, pero ahora, una vez terminado, estoy encantada con su compra.

 

VALORACIÓN: