Charlie nunca pensó que podría gustarle a Nick, pero ahora son novios. Oficialmente. Y Nick incluso se lo ha contado a su madre. Pero dar este paso no es algo que hagas una sola vez: está el hermano mayor de Nick, el viaje a París y todos sus amigos y familia… Y la vida puede ser dura, incluso cuando tienes a tu lado a alguien que te quiere. A medida que sus sentimientos se vuelven más profundos, Charlie y Nick se necesitarán más de lo que lo han hecho nunca… Hearstopper trata del amor, la amistad y la lealtad, pero también de trastornos mentales. Une las pequeñas historias de la vida de Nick y Charlie que, juntas, forman algo mayor, algo que nos llega a todos al corazón.
Reseña del tercer volumen de esta novela gráfica. Es una historia difícil de soltar. Leí los dos primeros seguidos y luego decidí parar y darle un poco de aire, pero a los dos días ya tenía el tercer volumen en la mano y cuando termine esta reseña... iré a por el cuarto. Y, espero que el quinto llegue pronto en español a las librerías, de momento creo que está en inglés únicamente y no me apetece demasiado.
Pero, vamos al tercer volumen que cuenta también con unas 300 páginas, curiosamente cada volumen va sumando las páginas anteriores, así que cuando acabamos este llevamos unas 950 páginas, o incluso, alguna más.
En este número, Nick y Charlie ya son una pareja, son novios, pero ahora es el momento de decirlo a su entorno. Y todo ello ocurre en un viaje a París. Vemos como su relación avanza, también las historias secundarias que se van interconectando viven sus momentos de dudas y problemas, y es bastante entretenido y, hasta cierto punto, divertido de leer.
Seguimos con la problemática a la hora de ser juzgados y creo que podemos ver la realidad de estas situaciones, o sea que, parece que nadie sabe lo que sucede pero en realidad todo el mundo lo sospecha, y tampoco pasa nada por salir con un chico en lugar de con una chica, o al revés.
Creo que es interesante que esto se exprese de la forma en que lo hace la autora, desde la normalización e inclusión.
Por ello, sigo pensando como al inicio, que es una obra tanto para jóvenes como para adultos y creo que puede hacer recapacitar a muchos y ver el tema del colectivo LGTB+ diferente.
La parte gráfica sigue en la línea de las anteriores, en blanco y negro, con texto pero sin llegar a saturar, dando más importancia a lo dibujado que no a lo escrito y a pesar de ello, los diálogos siguen siendo chulos de leer y resultan bastante inocentes.
Tengo ganas de empezar con el cuarto tomo y seguro que me quedaré con ganas del quinto, pero ya os contaré en la próxima reseña.
Confieso que ya he descartado leerlos de forma más pausada, al final, si quiero ver como avanza, poco más puedo hacer. Recomendada si buscáis una novela gráfica que trate el tema de la homosexualidad o mejor dicho, de la identidad sexual.
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