SINOPSIS
Seiichi, de trece años, es introvertido y algo inseguro, por lo que nunca ha tenido muchos amigos en la escuela. Su madre, Seiko, que siempre se ha comportado de manera excesivamente sobreprotectora con él, lo tiene muy mimado. Pero ahora que Seiichi empieza a ser más independiente y pasa más tiempo con otras personas, como su primo Shigeru o su compañera de clase Fukiishi, Seiko teme que alejen a “su niño” de ella. Por eso mismo, piensa cortar de raíz cualquier relación de su hijo con los demás, haciendo lo que sea necesario para conseguirlo...
Rastros de sangre es un manga de Shuzo Oshimi publicado por Milky Way Ediciones.
De momento hay 11 tomos publicados y es una serie abierta. Cada libro cuenta con algo más de 200 páginas.
Estamos delante de un drama psicológico que se basa en el amor enfermizo de una madre por su hijo. Como todos los hijxs, cuando estos van creciendo y entrando en la pubertad, se van apartando de sus progenitores y precisamente a este momento asistimos.
Seiichi es un chico de trece años, tímido, introvertido, le cuesta relacionarse con los demás pero poco a poco logra integrarse.
Este manga nos muestra lo que es capaz de hacer una madre por su hijo y creedme, en sus páginas veréis cosas... inquietantes y aterradoras.
Con el paso de los volúmenes conoceremos al chico y a su entorno, madre y padre, al resto de la familia y amigxs. La cosa se irá complicando con la aparición de una chica, esta generará un conflicto con la posesiva madre.
Es un manga con pocos personajes cosa que favorece que conozcamos mejor su personalidad y veamos la evolución que tienen a lo largo de la historia. Además de Siichi y su madre, conocemos al padre, a su primo y sus padres, aunque nos centramos sobretodo en su madre y la chica de la que os hablaba ntes. Parece que Oshimi quiere que vemos el contraste entre la madre de Siichi y la de su primo.
El autor, como veis, retrata la familia típica japonesa: el padre trabajador es quién lleva el dinero a casa, y la madre se ocupa del único hijo del matrimonio.
Quizá por ello resulta aún más inquietante todo lo que va sucediendo.
La dimensión psicológica del conjunto es lo más importante para la puesta en escena, las relaciones, el pasado de la madre, todo ello hace que sea un manga con un fondo interesante, nada plano ni superficial. Nos mantiene pegados a lo que va ocurriendo, sobretodo a como se desarrolla la relación entre madre e hijo, muchas veces confusa para ellos pero también para el propio lector.
Respecto al apartado gráfico, es un manga en blanco y negro donde el autor da mucha importancia a los rostros, las miradas y expresiones. Se dedican muchas splash pages (página completa con un solo dibujo) a ello, a retratar un rostro, destacar una mirada. Las caras trasmiten lo que ocurre o ha ocurrido, lo que sienten.
Eso sí, la madre tiene numerosas splash pages con un rostro dulce, angelical... pero el lector sabe lo que ha hecho o quiere hacer, así que resulta un contraste algo perturbador.
Líneas finas, efectos claroscuros, un dibujo limpio pero sin ser sencillo o plano.
Muchas imágenes parecen pinturas, por su grado de detalle y el aire que tienen los personajes, es imposible no quedarte embodadx disfrutando de ello, viendo también la importancia tanto de lo que se dice con un texto, como de aquello que puede trasmitir un dibujo.
Las páginas sin texto o los textos breves convierten la lectura de este manga en algo rápido, no creo que tardemos más de 15 minutos en la lectura de cada tomo, eso sí, es terminar uno y querer ir a por el siguiente. Es un drama para mí haber llegado al último número publicado en español, el 11 pues ahora tengo que estar pendiente de cuando salgan el resto de números y esa espera es lo que peor llevo.
A medida que avancéis en la narración, se van resolviendo algunos aspectos pero resulta inquietante hacia donde tira el conjunto. Debo deciros que estoy disfrutando mucho de esta historia y no será lo único que lea de este mangaka.
Así pues, si queréis un manga que no sea de terror en sí, pero que os llene de mal rollo e inquietud, que resulte hasta cierto punto angustiante, puede ser una buena elección.
Lo único negativo, para mí, es que no sea una historia acabada y tener que esperar para saber como acaba todo.
VALORACIÓN:
Hola!
ResponderEliminarPues este si es un tema perturbador, por el simple hecho de que ya es una obsesión con el hijo, ajjajaaj, que miedo.
Espero que la espera para los siguientes no se te haga tan insufrible.
Un beso!